Información General Tinka, la empresa de bolitas de vidrio, en riesgo por el aumento del gas Mientras las industrias santafecinas aún intentan resolver el ahogo por los impresionantes incrementos en las tarifas de electricidad recibidas el mes pasado, se encuentran desde este mes con un nuevo tarifazo: el del gas. Algunas empresas que utilizan el recurso en su proceso productivo recibieron las últimas facturas con hasta 1500 /1600 por ciento de aumento, según confirmó el ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani. El funcionario admitió la preocupación del gobierno provincial por la "asfixiante" situación que enfrentan los sectores productivos. A modo de ejemplo comentó que una empresa recibió una factura de 380 mil pesos mientras que la anterior había sido de 30 mil pesos.
Contigiani explicó que su cartera recibió llamados de industriales preocupados. "Comenzaron a llegar a las industrias boletas de gas con aumento del 1500 a 1600 por ciento. O sea, no resolvimos la situación de las tarifas eléctricas y ya nos llegan al ministerio notas, pedidos, urgencias por el aumento irracional y desproporcional de gas. Más grave aún es en un contexto en un contexto de recesión económica", sostuvo el ministro que debió enfrentar quejas por una seguidilla de situaciones negativas, desde las inundaciones hasta tarifazos.
A fines de abril pasado, Litoral Gas, la empresa, que desde 1992 distribuye gas natural por redes en el área geográfica conformada por las provincias de Santa Fe y el noreste de la provincia de Buenos Aires, anunció un doble aumento, es decir, al incremento de tarifa anunciado para abril se sumó otro que debería haberse registrado en 2014 pero que estaba frenado por una medida judicial, recientemente destrabada. Así, se habló que para el uso residencial se percibiría un aumento del 700 por ciento de incremento. CASO TINKA Uno de los casos testigos mencionado por Contigiani es el de la fábrica de bolitas Tinka, ubicada en San Jorge, departamento San Martín, 148 kilómetros al Sudoeste de esta capital, única del país en su tipo, que de pagar 35 mil pesos pasó a desembolsar 185 mil pesos.
Según fuentes empresarias, el nuevo costo a enfrentar por la firma podría significar el eventual cese de actividades. Por eso, la preocupación oficial se hizo pública.
La historia de Tinka comenzó a escribirse en 1953, cuando dos osados emprendedores, Victor Hugo Chiarlo y Domingo Vrech, entonces empleados de la famosa cristalería Saica, instalada en San Jorge, solicitaron un permiso gremial de un mes con la loca idea de comenzar con la instalación de una fábrica de bolitas de vidrio. Sin financiamiento, consiguen que los únicos fabricantes en América del Sur de bolitas de mármol, Manavella y Cía SRL, de Rosario, resolvieran apostar por la iniciativa. Las primeras muestras enviadas terminaron de convencer a los empresarios que, mediante contrato, por seis meses recibirán toda la producción a cambio del dinero necesario para instalar la fábrica en San Jorge.
Para incrementar la producción se utilizaron maquinarias de fabricación casera, obteniéndose, en la década de los 60 una producción de 6000 bolitas por hora.
En 1995 se adquirió en Taiwán una máquina que elevó la producción a 8500 por hora. Años después se compra una máquina del mismo origen para la fabricación de bolones en una cantidad aproximada de 3.800 por hora. Hoy, con dichas máquinas y el ingenio argentino, se fabrican 400.000 bolitas diarias.
Fuente: Diario Tag
Miércoles, 18 de mayo de 2016
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