Informes INDEC. La brecha laboral de género ronda el 18% y creció el desempleo entre las jóvenes. El desempleo entre las jóvenes escaló 13 puntos de un trimestre a otro, prácticamente triplicando la cifra de los varones. La tasa de actividad entrelas mujeres es de 44,2 por ciento; entre los hombres es de 62,9 por ciento en el aglomerado urbano Corrientes. La brecha laboral de género es de 18,7 puntos, la cual registró un leve crecimiento en relación con el trimestre anterior. Uno de los aspectos más alarmantes es el aumento de la desocupación entre las jóvenes, que trepó 13,4 por ciento. En el tercer trimestre de 2019 la tasa de actividad entre las mujeres fue de 44,2 puntos. En el segundo era de 44,8 puntos. Si bien se mantiene este indicador, la brecha de género registró un leve incremento de 1,3 punto, que orilla los 19 puntos en la ciudad de Corrientes que, más específicamente, alcanza los 18,7 puntos. Esta es la diferencia entre la tasa de actividad entre hombres y mujeres en el aglomerado urbano. En tanto, la tasa de empleo entre las trabajadoras es de 42,8 por ciento. Entre los varones es de 58,5 por ciento, según un informe sobre el mercado de trabajo que recientemente publicó el Indec. La brecha es de 15,7 por ciento. Un número que ha registrado cambios muy significativos en términos estadísticos fue la tasa de desocupación entre las jóvenes. Esta se disparó un 13,4 por ciento de un trimestre a otro. En el segundo trimestre de 2019 fue de 7,4 puntos entre las mujeres de hasta 29 años en Corrientes. En el tercer trimestre esa cifra ascendió a 20,7 por ciento, según el informe del organismo nacional. Heterogeneidades “La tasa de participación laboral femenina, tanto en períodos de crecimiento como de decrecimiento, enmascara heterogeneidades por edad, nivel educativo y tenencia de hijas/os”, según señala un estudio del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) que lleva por título “El género del trabajo”. De acuerdo con lo señalado en el documento, el aumento de la participación femenina entre 1974 y 2003 en Argentina fue resultado, principalmente, de una mayor incorporación de mujeres de entre 25 y 54 años. Esto contribuyó a compensar un descenso paulatino de la participación de jóvenes de entre 15 y 24 años. Según el trabajo de investigadores como Luis Beccaria y Roxana Maurizio, “el cambio de tendencia observado desde principios de la primera década del 2000 puede responder a un cambio en el comportamiento de las mujeres de entre 25 y 54 años con hijas/os”. Cabe señalar que en el subgrupo sin esas responsabilidades de cuidado, su participación se había estancado en décadas anteriores, como en los 90. Sin embargo, “la literatura y el análisis de datos, en conjunto con otras variables, señalan como el principal factor asociado al sostenido descenso de la tasa de actividad de las jóvenes a los mayores niveles de participación en los estudios. Así, mientras el porcentaje de jóvenes de entre 18 y 24 años activas que también estudia es muy similar en 2003 y 2018 (cercano al 35 por ciento); en el caso de las jóvenes inactivas, que actualmente representan una proporción mayor del total, aumentó significativamente la proporción que estudia (66 por ciento en la actualidad contra 59 por ciento en 2003)”, indica el trabajo. Empero, se observa otra tendencia, más allá de los cambios positivos de la trayectoria educativa de las jóvenes, estudios señalan que las responsabilidades sociales de cuidado ocupan una porción importante en sus tiempos, lo cual incide en sus posibilidades de acceso al mercado laboral. Esto vinculado mayoritariamente a los roles de género. “En todas las fuentes se confirma que este grupo de mujeres que dedican tiempo a funciones y tareas de cuidado constituye la mayor proporción de las personas jóvenes mal llamadas ‘ni-ni- ni’ o ‘triple ni’ en nuestro país (jóvenes que no estudian, no trabajan, ni buscan trabajo)”, señala el informe de Cippec que lleva la firma de Gala Díaz Langou, Gimena de León, José Florito, Florencia Caro Sachetti, Alejandro Biondi Rodríguez, Matilde Karczmarczyk, realizado en colaboración con ONU Mujeres, Organización Internacional del Trabajo (OIT) y Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud). El estudio también consigna que la desocupación “se acentúa para los grupos etarios más jóvenes, tanto para varones como para mujeres. Entre los 18 y los 24 años, el porcentaje de desempleo femenino más que duplica el valor promedio para las mujeres y muestra una importante brecha con la desocupación masculina”. Esto se observó en los últimos números publicados por el Indec. En el aglomerado urbano Corrientes, la tasa de desocupación entre las jóvenes fue de 20,7 por ciento en el tercer trimestre de 2019, mientras que entre los varones de hasta 29 años fue de 7,1 por ciento. Esto significa que la tasa de desocupación femenina prácticamente triplica a la masculina. Entre las mujeres mayores de 29, el desempleo fue de 8,7 puntos en la ciudad. La diferencia es muy superior a la desocupación entre las jóvenes trabajadoras, de acuerdo con el informe del organismo nacional. “A mayor edad, la brecha en la tasa de desocupación declina, e incluso se incrementa para los varones, lo cual podría estar explicado por la diferencia en la edad jubilatoria de mujeres y varones”, añade el trabajo de Cippec. El documento, además, señala que “la brecha entre mujeres y varones en el mundo del trabajo sigue estando presente dado que, a pesar de los significativos avances de las últimas décadas, las dificultades para alcanzar la igualdad plena entre géneros son aún palpables: mientras que en Argentina un 80 por ciento de los varones participan del mercado laboral, solo el 59 por ciento de las mujeres lo hacen. Esto ubica a nuestro país en línea con el promedio latinoamericano y rezagado con respecto a algunos países que están innovando en la región, como Colombia y Uruguay”.
Fuente: INDEC.
Jueves, 26 de diciembre de 2019
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