Economía Los sectores que lideran la demanda de empleo en Argentina El último dato disponible del Indec señala que durante el segundo trimestre del año, cuando regía la cuarentena más estricta, se perdieron 3,7 millones de puestos de trabajo en el país y la tasa de desocupación subió a 13,1%. Sin embargo, esta cifra está “contenida” por la fuerte caída de la Población Económicamente Activa (PEA), dada la excepcionalidad de la situación: muchas personas dejaron de buscar trabajo y salieron del mercado laboral. Si se corrige esa caída y la PEA se ubicara en los niveles previos a la pandemia, la tasa de desocupación “real” en el país se ubicó en la zona del 29%, según coinciden los cálculos de los especialistas. De esta manera, entre abril y junio de este año el nivel de desocupación en el país se triplicó respecto al trimestre anterior y frente al mismo trimestre del año pasado, que en ambos casos estuvo un poco por encima del 10%. “Hace un año era impensado imaginar que hoy, finalizando el 2020, podríamos estar peor. Sin embargo, pandemia mediante, este año termina de la peor forma, con la desocupación más alta de los últimos dieciséis ejercicios”, afirmó ayer en un informe Matías Ghidini, gerente general de la consultora especializada en recursos humanos GhidiniRodil. El informe señala el mal desempeño que ya traía el mercado laboral, además de la “profunda reforma laboral eternamente postergada y la miopía de nuestros dirigentes para acordar y consensuar un planeamiento estratégico de nuestros recursos humanos a largo plazo”, lo cual muestra “sus consecuencias”. Hacia adelante, tanto en el corto como en el largo plazo, Ghidini afirma que el mercado laboral argentino ya vive una reconfiguración. “A tono con los meses que vivimos, el empleo ha entrado en un veranito laboral. Una demanda de recursos humanos que, a fuerza de reaperturas y descenso de contagios, se encuentra en recuperación y por encima de los valores del oscuro segundo trimestre. Y que, vale aclararlo, se apoya por ahora sólo en algunos sectores de la economía: tecnología, comercio electrónico, fintech, logística, agroindustria, laboratorios”, indicó. “En los cimientos y de cara a 2021, habrá que aprender a navegar nuevas tendencias. El teletrabajo y la virtualidad para las relaciones, el distanciamiento social en los encuentros presenciales y una naciente dicotomía autóctona en los más jóvenes: emigrar y soltar raíces para buscar mejores oportunidades en otros países, versus apostar localmente y emprender. Mucha de nuestra juventud hoy se debate entre tirar la toalla o seguir peleándola”, sostuvo. Ghdini señala que pronosticar el mercado laboral en 2021 “no es más que una quimera”. No obstante, destaca que todavía hay oportunidades que subsisten en este “castigado escenario laboral”, como en el caso del sector de las tecnologías de la información: con exportaciones por casi US$ 2.000 millones, 115.000 empleos privados y de calidad y una demanda no cubierta por ausencia de profesionales de 10.000 nuevos puestos por año. “Por ahí Argentina tiene una rampa al futuro”, resaltó el especialista. “Sin olvidarnos de las trabas de siempre, como el arcaico marco laboral-legal, la economía inestable, los permanente cambios de rumbos según la ideología de turno y un inefable ecosistema sindical. Existe hoy un abanico de opciones tan vigentes como diferentes y decisivas para nuestro futuro, lo que hace muy difícil pronosticar y prepararse para 2021”, aseveró.
Fuente: El economista
Jueves, 10 de diciembre de 2020
|