Economía. IFE: el Gobierno analiza transformarlo en una “renta básica ciudadana”. Mientras la segunda edición del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) todavía sigue siendo pagado a casi 9 millones de hogares, el Gobierno trata de pensar el día después. Dada la enorme erogación que supone un programa que originalmente estaba pensado para alcanzar a 3,5 millones de familias y terminó generando un costo mucho mayor de lo esperado. Pero no hay recursos para todo, ya que hasta la emisión monetaria del Banco Central, principal fuente de financiamiento a la que recurre hoy el Tesoro, tiene un límite legal que obliga a moderar el gasto. Un primer intento de reducir el impacto en las cuentas públicas del programa, que el tercer pago del IFE fuera focalizado al AMBA y Chaco, fue abortado por el propio presidente Alberto Fernández a pedido de los gobernadores. Pero de todas formas en el Gobierno empiezan a pensar el día después. La titular de la Anses, Fernanda Raverta, llegó al ente previsional en medio de la cuarentena en reemplazo de Alejandro Vanoli, precisamente para tratar de enderezar un programa que su antecesor estimó como de un tercio del tamaño que terminó teniendo. La funcionaria repite en cada aparición que el IFE es extraordinario y que, cada edición, se trata de un programa único. Los dos pagos ya concretados o en vías de concretarse surgieron de decretos de necesidad y urgencia específicos, y el tercero también requerirá de uno similar. No se trata de una mensualidad ni de un plan que haya llegado para quedarse. La repetición de ediciones depende, entonces, de la evolución de los contagios y del impacto económico de las medidas de distanciamiento social. El primer intento por reducir el alcance del plan, por lo tanto, se basó en las cuarentenas diferenciadas que coexisten en el país. Si Ciudad de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires y Chaco volvían a la fase uno de la cuarentena por el nivel de contagios, era lógico focalizar el pago extraordinario a los beneficiarios de esas regiones. Pero más allá de que las medidas de distanciamiento se relajaron, el parate económico sigue siendo severo y los gobernadores con los que el presidente se precia de cogobernar pidieron una reconsideración en una teleconferencia de principios de julio y obtuvieron que el tercer pago se haga, una vez más, en todo el país.
Fuente: Ámbito.
Martes, 14 de julio de 2020
|