Sociedad. “Operativo Araña”: bajaron y limpiaron la majestuosa lámpara del Teatro Colón. La monumental araña del primer coliseo nacional pesa 1.300 kilos, está vestida por 552 focos y decorada por 12 tulipas. A las 10:09 del lunes 23 de septiembre comenzó el descenso de la majestuosa araña del Teatro Colón. Treinta trabajadores -entre operarios de técnica, mantenimiento y limpieza- participaron del "operativo araña" para cumplir con la ceremonia de rejuvenecimiento de la luminaria de la Sala Principal del coliseo nacional. Cuatro horas después, la araña, sin polvo e iluminada, volvió al techo del teatro, custodiada por los bailarines y cantantes que creó el artista plástico argentino Raúl Soldi en 1966. La limpieza de la araña es una actividad que se realiza todos los años desde su reinauguración en 2010. Es una suerte de ceremonia, de rito, que congrega a todos los trabajadores del teatro. Para la directora general del Colón, María Victoria Alcaraz, es un objeto energético, casi místico: "Es el día en el que bajamos nuestra joya más preciada para tenerla al alcance de la mano y de la dimensión humana. Es un ritual que tenemos: todo el equipo que trabaja en el Teatro Colón pasa a verla y a tocarla porque nos trae buena suerte. Además de su belleza, verla tan cerca y tan grande es imponente". Es un proceso que demanda tiempo y dedicación. La araña desciende casi treinta metros para quedar a centímetros de las butacas del centro de la sala, que fueron previamente cubiertas por una gran lona negra. En la primera fase trabajaron operarios del teatro para destrabarla, desenchufarla e iniciar el descenso a través de un malacate, dos cables de acero y dos sogas sostenidas por dos colaboradores ubicados en los palcos superiores laterales que evitan el balanceo de la enorme estructura.
Fuente: www.diarionorte.com
Martes, 24 de septiembre de 2019
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