Fondo Monetario Internacional Nuevo acuerdo Macri-FMI, nuevo precio del dólar: qué son las "bandas" de flotación cambiaria Macri y Dujovne confirmaron que llegó a buen término la negociación. Insinuaron que el BCRA post Caputo cambiará su metodología para controlar al dólar.
Si no surge un contratiempo de último minuto, la Argentina y el Fondo Monetario darán a conocer el nuevo acuerdo, que reescribirá el anunciado hace menos de cuatro meses y que quedó sepultado por la crisis.
El ministro Nicolás Dujovne se quedó especialmente en Nueva York para anunciarlo en horas de la tarde, según comentó el propio funcionario durante una conferencia de prensa encabezada por Mauricio Macri.
Fue el corolario de una jornada de altísima tensión, iniciada con la sorpresiva renuncia de Luis Caputo y su reemplazo por Guido Sandleris, quien hasta ahora se desempeñaba como viceministro Dujovne.
La cotización del dólar, con gran volatilidad intradiaria (mínimos de $37,70 y máximos de $39,30), terminó subiendo 81 centavos para cerrar en $38,10 en el circuito mayorista. En los bancos, el billete verde terminó en $38,88 (80 centavos de alza) luego de tocar los $40 a media mañana.
El Banco Central, en el día del debut de Guido Sandleris, no intervino e incluso sumó u$s60 millones para las reservas, que ahora totalizan u$s49.601 millones.
El resultado final de la jornada financiera, mucho mejor que el nervioso comienzo, hacen pensar en una expectativa positiva de los inversores respecto del acuerdo que se anunciará con el FMI.
Durante la conferencia de prensa, Macri no quiso adelantarse a lo que será un anuncio formal. "Será la primera vez que la Argentina entra a una crisis con unas reglas y sale de la crisis con las mismas. Sin corralito ni tipos de cambio raros. Y esto es fundamental para la credibilidad futura”, mencionó.
El anuncio de esta tarde debería despejar las dudas de los financistas, que no pudieron zanjarse durante la visita de 48 horas a Wall Street del propio Macri. Y que incluso se profundizaron tras conocerse la salida de Luis "Toto" Caputo, alguna vez promocionado por la Casa Rosada como "el Messi de las finanzas".
La principal cuestión refiere a las condiciones que tendrá el nuevo acuerdo. Se sabe que el Gobierno ha depositado en su alianza con el FMI la salida de la crisis. Es la base sobre la que debería reconstituirse la confianza. Es el camino que inició en mayo, cuando recrudecieron las complicaciones cambiarias y que hasta el momento no tuvo ningún resultado positivo.
Lo primero que mirarán los inversores es el volumen del acuerdo. Es decir, si se agrandan los u$s50.000 millones del primer pacto. En segundo lugar, si hay un monto de dinero relevante que se vaya a desembolsar en lo inmediato. Y, por último, si el FMI permitirá que el Banco Central intervenga en el mercado en caso de que el tipo de cambio se escape.
Precisamente, una de las versiones más creíbles que corrían en la City era que Caputo se había alejado del BCRA porque los técnicos del Fondo cuestionaron su estrategia para domar al dólar. La semana pasada, contrariando expresamente la opinión del organismo, había abandonado el sistema de subastas e intervenido fuerte, vendiendo reservas para lograr una efímera paz cambiaria.
De manera que la gran pregunta que los operadores se formulan es si Sandleris tendrá -o no- las manos atadas para intervenir.
Sobre este punto en particular, Dujovne se limitó a ratificar el "tipo de cambio flotante" y adelantó que habrá "retoques a la política monetaria en general".
La lectura inmediata fue que, muy probablemente, se ponga en práctica un esquema de banda cambiaria dentro de la cual tendrá que moverse la divisa estadounidense.
Según pudo confirmar iProfesional de fuentes oficiales, el nuevo esquema contemplará:
1. - La eliminación de las metas de inflación (que desde su puesta en práctica con Federico Sturzenegger nunca sirvieron como ancla para la economía)
2. - El control férreo de los agregados monetarios (dinero en circulación)
3. - Un esquema de flotación cambiaria con bandas "externas" e "internas"
En relación con este último punto, lo que se hace es fijar un rango dentro del cual el dólar puede moverse libremente. Si supera un determinado nivel, el Banco Central sale a vender para bajar la cotización y llevarla al interior de esa banda. Si cae por debajo de un piso, compra para que suba.
"Será un esquema similar al que se venía negociando. La salida de Caputo no modifica nada. Sandleris formaba parte de esas reuniones con el staff del Fondo y obviamente avaló el nuevo programa monetario", aseguran los allegados al ahora número uno del Central.
El mismo Dujovne se refirió a este tema ayer por la tarde junto con Macri en una improvisada conferencia de prensa con corresponsales argentinos en Nueva York: "Sigue el esquema de flotación pero con retoques", dijo, escueto, el ministro de Hacienda.
Según adelantaron altas fuentes a iProfesional, el dinero en circulación deberá crecer "muy por debajo de la inflación".
Además, indicaron que "el Fondo quiere que se controle el alza de los precios secando la plaza de pesos y manteniendo las tasas de interés muy altas".
Lo que se interpreta en el mercado financiero es que la amplitud de la "banda" (valor piso y techo) dentro de la cual cotizará el dólar será bastante amplia como para limitar las intervenciones del Banco Central.
Precisamente esto era lo que cuestionaba el saliente Caputo: creía que el banco tenía que ostentar poder de fuego para domesticar al dólar y así evitar que "te corran con dos mangos", tal como relataba a sus íntimos. Ese tema, y el desgaste que sufrió el otrora "Messi del equipo económico" en un puesto que nunca quiso agarrar, precipitó el portazo.
"Su renuncia se produjo después de aparentes fricciones con el FMI y funcionarios del Gobierno por discrepancias con el programa monetario. Y, lo que es más importante, el régimen cambiario a futuro", puntualizaron desde el JP Morgan.
Tanto en el microcentro porteño como en Wall Street, las versiones sobre el inminente acuerdo impactaron favorablemente en los precios de los activos financieros. Es decir, no sólo en la cotización del billete verde.
- La Bolsa porteña, luego de un arranque negativo, repuntó a media rueda para cerrar con una suba del 2,59% con $1.287 millones negociados.
- Lo más destacado fueron los bancos: Grupo Supervielle (+8,52%) y Grupo Financiero Galicia (+7,78%) dentro del panel líder y Banco Francés (+9,44%) dentro del panel general. - Al igual que lo sucedido con el equity, a las bajas iniciales en los bonos en dólares le siguieron órdenes de compra que los hicieron subir, a los de corto y mediano plazo, al menos 50 centavos promedio.
- Los títulos públicos en Nueva York treparon hasta 2% y el riesgo país cedió 2,8% para alcanzar los 598 puntos básicos. También ajustó y fuerte el Credit Default Swap (CDS) después del cambio de humor.
La mejora en los precios dio cuenta de las versiones que llegaron a oídos de los operadores:
1- Que el nuevo acuerdo contemplaría entre u$s60.000 y u$s70.000 millones (entre u$s10.000 y u$s20.000 millones adicionales al primer convenio)
2- Que habría entre u$s8.000 y u$s10.000 millones en lo inmediato, a manera de un primer desembolso
La principal duda es si Washington habilitará a Sandleris a intervenir ante una disparada adicional del tipo de cambio. Por eso mismo será clave conocer el esquema de banda de flotación que se anunciaría.
Algo de esto se reflejó en el informe divulgado por el JP Morgan entre sus clientes, al que tuvo acceso iProfesional. El reporte se centró en la idea de que la renuncia de Caputo sería un hecho positivo para que el país acceda a un paquete importante con el organismo internacional.
Con la incertidumbre sobre cuál será el monto que obtendrá el país, para la entidad el anuncio será levemente positivo para los bonos pero no alcanzará para despejar las dudas en el mercado cambiario.
"En nuestra opinión, los mercados ya habían estado anticipando un programa mejorado del FMI en las últimas semanas. Así, un anuncio definitivo serviría para estabilizar los rendimientos de los títulos en lugar de ajustarlos de manera significativa", vaticina el JP Morgan.
"Un programa renovado con el FMI seguiría siendo positivo para el crédito, y consideramos que los bonos denominados en euros ofrecen oportunidades más atractivas para posicionarse por un largo período táctico", le avisan a los clientes.
Con respecto al tipo de cambio, la película es menos clara, ya que el público puede seguir demandando una alta cantidad de billetes verdes incluso tras la devaluación.
"Hay varios factores que sugieren que la compra de dólares puede persistir, ya que la incertidumbre política sigue siendo alta", advierte la entidad.
Por si hiciera falta un recordatorio de cuál es el talón de Aquiles de la economía, este martes el Banco Central daba cuenta de la adquisición de billetes por parte del público en agosto: nada menos que u$s3.767 millones, cifra que deja en claro que la Argentina es uno de los pocos países en el que particulares y empresas compran cuando baja, y también cuando sube.
Fuente: Iprofesional
Miércoles, 26 de septiembre de 2018
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